“Rubia con lindos rasgos”: ¿Cómo lucía la australiana de 18 años antes de cubrir todo su cuerpo con tatuajes?
La duda puede alterar la forma en que alguien se comporta. Algunos buscan respuestas que los lleven a dietistas, médicos o incluso tatuadores, mientras que otros pueden querer aislarse y evitar la interacción social.
La protagonista australiana de nuestra narrativa, Amber Luke, experimentó justo lo que hemos descrito. Aunque era una hermosa rubia con un buen cuerpo, desde los 14 años luchaba con ideas de su propia fealdad, lo cual finalmente le causó una desesperación crónica.
Cuando Amber aún era adolescente, tomó la decisión de visitar un estudio de tatuajes en un intento por encontrar una solución a su problema. A partir de ese momento, continuó haciéndolo.
Con el tiempo, Amber comenzó a disfrutar de hacerse tatuajes y descubrió que servían como una buena distracción de su percepción negativa de sí misma.
Para cuando tenía 24 años, tenía 130 tatuajes, una lengua dividida similar a la de una serpiente, colmillos de vampiro, lóbulos de las orejas alargados y otros piercings corporales.
A pesar de todas estas modificaciones, aún sentía la necesidad de cambiar el color de la parte blanca de sus ojos. Ahora, algunas personas podrían encontrarla aterradora, ya que tiene ojos azules con una iris negra.
Recientemente, Amber reveló su intención de visitar Estados Unidos para que le coloquen puntas de plata en sus colmillos.
En total, ha invertido más de 1 millón de dólares en su metamorfosis. Es posible que te preguntes cómo consiguió tanto dinero. Sin embargo, Amber se sostiene económicamente a través de patrocinios mientras promociona diversos productos.
Gracias a sus características inusuales, puede mantenerse sin tener un trabajo regular.
Amber quiere destacar porque piensa que para cuando tenga 70 años, todas las chicas tendrán la misma apariencia. Es difícil discutir el hecho de que ella logra llamar la atención con éxito.