Richard Chamberlain se convirtió en el chico dorado después de “Dr. Kildare”: así luce hoy, a los 88 años.
Personas de todo el mundo, tanto jóvenes como mayores, se enamoraron de Richard Chamberlain cuando se convirtió en un actor popular en la década de 1960. Alcanzando la fama en varias series de televisión y películas, se convirtió en un ídolo de la época.
Richard Chamberlain, nacido el 31 de marzo de 1934 en Beverly Hills, California, encontró consuelo en los dramas de radio y misterios durante su infancia. A pesar de su timidez inicial, se dedicó a la actuación después de la universidad, atraído por la confianza mostrada por los actores en la pantalla.
En 1961, Chamberlain obtuvo el papel de Dr. Kildare en la serie médica del mismo nombre, convirtiéndose en un gran éxito con aclamación mundial. La popularidad del programa se debió al personaje compasivo del Dr. Kildare, que resonaba con el público que enfrentaba la inevitabilidad de situaciones médicas.
En medio del éxito, el contrato de Chamberlain con MGM llevó a una agenda agitada, manejando correo de admiradores, regalos y roles cinematográficos. A pesar de ser encasillado como una figura de telenovela, más tarde cambió su enfoque a actuaciones teatrales y logró el éxito en producciones teatrales.
En la década de 1980, Chamberlain obtuvo reconocimiento con roles en “Shogun” (1980) y “Los pájaros cantores” (1983), siendo este último merecedor de un Globo de Oro. Su regreso al teatro y logros en miniseries marcaron una nueva etapa en su carrera en Hollywood.
Más allá de su trayectoria profesional, la vida personal de Chamberlain estuvo marcada por desafíos, incluido el secreto de ser gay, una verdad que reveló en sus memorias de 2003, “Shattered Love”. A pesar de las presiones sociales, abrazó su identidad, demostrando valentía al revelarlo casi a los 70 años.
Chamberlain continuó su carrera, apareciendo en películas como “Finding Julia” y la próxima “Ecos del pasado”. A los 88 años, sigue siendo activo en la industria del entretenimiento, dejando un legado duradero como un talentoso actor que, en sus últimos años, encontró la libertad de ser él mismo.