Una mujer murió en la pobreza: ¡mientras su hermana famosa gastaba más en perros de lo que habría costado su tratamiento!
Alison Carey, la hermana de Mariah Carey, vivió una vida marcada por la adversidad. Luchó contra la adicción y la falta de hogar, enfrentando numerosos desafíos, como vivir en refugios y en las calles. A pesar de la fama mundial y la inmensa riqueza de Mariah, se informó que Alison no recibió apoyo de su hermana. Su relación estaba profundamente fracturada, debido a las acusaciones que Mariah hizo a principios de los años 90. Este distanciamiento continuó hasta la muerte de Alison en 2024, que trágicamente coincidió con el fallecimiento de su madre.
La vida de Alison estuvo plagada de dificultades. Se dedicó al trabajo sexual a una edad temprana y luchó contra una adicción a la heroína, que ella creía que contribuyó a su diagnóstico de VIH. Sus dificultades se intensificaron, llevándola a la falta de vivienda y a repetidas súplicas de ayuda a Mariah, que supuestamente fueron ignoradas. Una invasión violenta a su hogar en 2015 le dejó una lesión cerebral traumática, pero, según se informó, Mariah no ofreció ayuda financiera.
La salud de Alison empeoró aún más en 2020. A pesar de buscar ayuda en diversas agencias, incluida la Administración de la Seguridad Social y la oficina del senador Schumer, recibió apoyo limitado. Sus últimos días los pasó en cuidados paliativos antes de fallecer a los 63 años. Mariah reconoció las muertes tanto de su hermana como de su madre, pero no expresó públicamente pesar ni mencionó intentos de reconciliación.
El amigo de Alison, David Baker, reveló el profundo dolor de Alison por el distanciamiento de Mariah, preguntándose a menudo si su hermana o algún miembro de la familia asistiría a su funeral. A pesar de perdonar a Mariah, Alison no tenía el deseo de reparar su relación rota. Baker describió a Alison como una persona amable y sensible a pesar de sus luchas, y criticó a Mariah por su falta de apoyo durante los últimos años de Alison.
En su autobiografía de 2020, Mariah detalló su propia infancia traumática, incluidos incidentes de abuso y traición por parte de Alison. Describió los intentos de ayudar a Alison con su rehabilitación, pero finalmente se sintió incapaz de reparar su relación fracturada. Los hermanos de Mariah, particularmente su hermano Morgan, albergaban resentimiento hacia ella, lo que tensó aún más sus lazos ya deteriorados.
La brecha con sus hermanos se convirtió en un aspecto definitorio de la vida de Mariah. Habló abiertamente del dolor causado por sus críticas públicas y la exposición en los tabloides, reconociendo el trato “implacable” que recibió. A pesar de su éxito, Mariah finalmente tuvo que aceptar que su familia nunca sería la fuente de apoyo que anhelaba, priorizando su propio bienestar sobre los intentos de reconciliación.