Un amor que desafió décadas de prejuicios: ¡su matrimonio interracial sigue fortaleciéndose!

Leslie Uggams, una actriz y cantante estadounidense de múltiples talentos, ha disfrutado de una carrera extraordinaria que abarca más de siete décadas. Comenzó a actuar a los seis años, convirtiéndose rápidamente en una pionera en la industria del entretenimiento. Uggams fue la primera afroamericana en tener un papel fijo en un programa de variedades y más tarde recibió nominaciones al Emmy y al Globo de Oro por su icónico papel de Kizzy Reynolds en Roots. Su carrera en el teatro también brilló, logrando un Premio Tony por su actuación en Hallelujah, Baby!
Mientras estudiaba en la Professional Children’s School de Nueva York, Uggams conoció a su futuro esposo, Grahame Pratt. A pesar de que Pratt regresó a Australia, la pareja se reencontró y se casó en 1965, en una época en que el matrimonio interracial aún era ilegal en algunos estados de Estados Unidos. Su amor trascendió barreras sociales y legales, demostrando su determinación de estar juntos a pesar de los desafíos de la sociedad.
Su matrimonio de casi 60 años ha enfrentado diversas dificultades, incluyendo prejuicios y cartas de odio dirigidas a su relación interracial. Uggams recuerda los dolorosos mensajes llenos de insultos, pero atribuye la solidez de su vínculo a un sentido del humor compartido y a la risa constante, incluso en los momentos difíciles. Su capacidad de mantener la alegría y la resiliencia ha sido clave para la permanencia de su relación.
Pratt, un australiano en la industria del entretenimiento, nunca había salido con una mujer negra antes de conocer a Uggams. La única preocupación de su madre al conocer a Leslie era si era presbiteriana, lo cual era cierto, aportando un toque ligero a los retos que enfrentaron. Uggams reconoce que estar con un hombre blanco no estadounidense facilitó algunos aspectos de su camino, pero el prejuicio seguía siendo una realidad que debieron enfrentar juntos.
Juntos, Uggams y Pratt formaron una familia amorosa con dos hijos, Danielle y Justice, ambos con carreras en el teatro. A sus 81 años, Leslie Uggams sigue trabajando, apareciendo recientemente en Deadpool como Blind Al. Su duradera carrera y matrimonio son un testimonio de su talento, resiliencia y su inquebrantable fe en el poder del amor.