Shelley Long, la inolvidable estrella de Cheers, ha experimentado una notable transformación desde sus días de mayor fama. A sus 75 años, la actriz, antes reconocida por su imagen glamorosa, luce ahora un aspecto mucho más discreto. Tanto es así, que según se informa, sus nuevos vecinos ni siquiera la reconocieron cuando se mudó.

Aunque en un principio Long aspiraba a una carrera en el drama, su talento para la comedia pronto la llevó por otro camino. Sus primeros años en la industria estuvieron marcados por trabajos en comerciales y sketches de improvisación, que le sirvieron de trampolín hacia el papel que definiría su carrera: Diane Chambers en la icónica serie Cheers.

Gracias a Cheers, Long alcanzó el estrellato, recibiendo elogios de la crítica y dos Globos de Oro. Su química en pantalla con Ted Danson era innegable, conquistando al público con sus ingeniosos intercambios y su inolvidable historia de amor.

Más allá de la serie, Long demostró su versatilidad en películas como Troop Beverly Hills, donde interpretó de manera hilarante a una excéntrica líder de un grupo de Girl Scouts, y The Money Pit, junto a Tom Hanks, en la que la pareja ofreció una divertida y caótica representación de una renovación del hogar que se sale de control.

Con el paso del tiempo, la actriz fue asumiendo papeles más pequeños, alejándose poco a poco del ojo público. Así llegó el final de una era para Long, quien alguna vez fue una de las figuras más queridas de la televisión.