Richard Gere, uno de los galanes más icónicos del cine en los años 80 y 90, no solo cautivó al público con su carisma en pantalla, sino también con su sonado romance con la supermodelo Cindy Crawford. En plena cima de su fama, su matrimonio representó la fusión ideal entre Hollywood y el mundo de la moda. Eran inseparables en eventos de alto perfil y su imagen se convirtió en sinónimo de glamour. Sin embargo, detrás de la perfección aparente, su relación solo duró cuatro años, y su ruptura se debió más a diferencias personales que a los rumores sobre su orientación sexual.

Años después, en una entrevista sincera, Cindy Crawford reveló las verdaderas razones del final de su matrimonio. Explicó que la diferencia de edad —17 años— y sus estilos de vida tan distintos dificultaban mantener una conexión real. Además, señaló que Gere no estaba convencido al principio de casarse, lo que la llevó a poner las cartas sobre la mesa: o se comprometían de verdad, o cada quien seguía su camino. Aunque compartían una química intensa, Cindy admite ahora que no existía una amistad sólida entre ellos, algo que considera esencial para sostener una relación duradera.

La chispa entre ellos se encendió en 1988, durante una barbacoa repleta de celebridades, y desde entonces se convirtieron en una de las parejas más comentadas del momento. A pesar de la reticencia inicial de Gere al matrimonio, terminaron casándose de forma inesperada en Las Vegas el 12 de diciembre de 1991, en una ceremonia íntima y alejada de los flashes, lo que contrastó con su vida pública.

Durante su tiempo juntos, fueron blanco frecuente de rumores que insinuaban que su matrimonio era una fachada para ocultar preferencias sexuales. Para frenar la ola de especulaciones, publicaron un anuncio de página completa en el London Times, reafirmando su heterosexualidad y fidelidad mutua. Crawford también tuvo que enfrentar críticas similares, especialmente tras su portada provocadora en Vanity Fair junto a la cantante K.D. Lang.

La relación llegó oficialmente a su fin en 1995. Con el tiempo, Cindy reconoció que la falta de una amistad genuina y la distancia emocional terminaron separándolos. Aunque alguna vez compartieron una conexión poderosa, hoy ella describe ese vínculo como lejano pero cordial, y dice que Richard Gere es más una figura pública que alguien que realmente formó parte de su intimidad personal.