Cómo vive el vendedor más común de una tienda de comestibles en la remota Suecia
En el tranquilo pueblo sueco de Shötorp, lejos de los bulliciosos megapólis y habitado por unas 200 personas, se encuentra una acogedora casa roja al borde de un lago. En este lugar reside una familia común, cuya vida encanta por su simplicidad y atmósfera idílica.
La familia de la que hablaremos hoy reside en esta encantadora casa. La esposa trabaja en una tienda de comestibles en el pueblo vecino, al que llega en bicicleta. El esposo es carpintero.
Su pequeña pero acogedora casa roja es un ejemplo típico de arquitectura escandinava. Junto a la casa hay un jardín floreciente. Desde las ventanas se disfruta de una vista fascinante del lago y el bosque.
Además, cerca pasa la vía férrea, pero este hecho no molesta a la familia en lo absoluto.
La espaciosa cocina-comedor es donde la familia se reúne para cenar y compartir las impresiones del día.
En el interior predominan los colores gris y blanco.
La habitación principal es sencilla pero muy acogedora.
Detrás de las cortinas de la habitación principal se encuentra la terraza con una vista impresionante.
La sala de estar también está decorada en tonos grises. Aparentemente sencillo, ¡pero qué estilo! Los suecos saben cómo crear interiores elegantes y funcionales.
Sin embargo, el baño en términos de decoración es más modesto que el resto de las habitaciones.
En el segundo piso hay una sala de estar.
Y una habitación infantil para dos niñas.
En el sótano se encuentra la lavandería.
También hay una pequeña sauna y otro baño.
La vida lejos de la civilización tiene sus ventajas y desventajas. Por un lado, el aire limpio, la conexión con la naturaleza, los vecinos amigables y el ritmo de vida tranquilo brindan una sensación de paz y armonía. Por otro lado, la lejanía de las grandes ciudades, la limitada oferta de entretenimiento y las oportunidades de crecimiento profesional pueden ser un obstáculo para algunas personas.
Pero para esta familia, Shötorp se ha convertido en un verdadero paraíso. Aquí aprecian las simples alegrías de la vida, cuidan la naturaleza y siempre reciben con gusto a los visitantes.
¿Qué te parece la casa? Comparte tus impresiones de la excursión.