De unidas por el pecho a niños llenos de vida: así están las gemelas separadas 3 años después —Mira sus fotos

La historia de Annabelle e Isabelle Bateson comenzó como una bendición acompañada de un enorme desafío para sus padres en Irlanda del Norte. Tras años de tratamientos de infertilidad, la pareja recibió con alegría la noticia de que esperaban gemelas. Sin embargo, la felicidad se vio empañada cuando los médicos revelaron que las niñas estaban unidas desde el pecho hasta la pelvis, compartiendo órganos vitales como el hígado, los intestinos, la vejiga e incluso una sola pierna entre ambas. Aunque cada una tenía una pierna propia, sus cuerpos estaban tan entrelazados que los especialistas dudaban si la separación sería alguna vez posible.
Las gemelas nacieron en marzo de 2022 en un hospital universitario de Londres y fueron trasladadas de inmediato a un centro pediátrico de referencia. Allí, un equipo médico dedicó meses a planificar detalladamente la complicada separación. Con la ayuda de imágenes avanzadas, modelos en 3D e incluso simulaciones virtuales, los doctores estudiaron minuciosamente la anatomía de las niñas para diseñar el procedimiento más seguro. El objetivo no era solo separarlas, sino darles la oportunidad de crecer y desarrollarse de forma independiente.
Ese gran día llegó en septiembre de 2022. Más de treinta expertos trabajaron en dos quirófanos durante dieciocho intensas horas. Finalmente, tras largas horas de concentración absoluta, Annabelle e Isabelle fueron colocadas en mesas distintas por primera vez en sus vidas. Cada una conservó una sola pierna, lo que implicaba nuevos retos médicos, pero al mismo tiempo marcaba el inicio de un nuevo capítulo. La recuperación exigió semanas en cuidados intensivos, decenas de cambios de vendajes y múltiples procedimientos posteriores—en total, alrededor de veinte cirugías desde su nacimiento.
Hoy, con tres años de edad, Annabelle e Isabelle muestran un progreso extraordinario. Con el apoyo de su familia y del equipo médico, aprenden a adaptarse a sus circunstancias únicas. Ambas realizan fisioterapia, utilizan ortesis y se preparan para recibir prótesis que les darán mayor movilidad e independencia. A pesar de su complejo inicio, crecen como dos hermanas normales y felices.
Sus personalidades ya empiezan a destacar: Annabelle es extrovertida, vivaz y amante del canto, siempre queriendo ser el centro de la vida familiar. Isabelle, en cambio, es más reservada, pero decidida y llena de energía. Juntas representan la resiliencia, la alegría y el triunfo de la medicina moderna. Su camino es un recordatorio conmovedor de que incluso los obstáculos más desafiantes pueden superarse con esperanza, amor y perseverancia.