El último número de *The Rake* presenta una portada adornada con fotos de una mujer bastante pulida y retocada, que, por alguna razón, se hace llamar Sharon Stone. Al menos, eso es lo que ha generado la indignación de los fans, sorprendidos por las transformaciones radicales que son sin duda el resultado de la magia digital.

Los seguidores leales de la estrella insisten en que la verdadera Sharon Stone es mucho más deslumbrante que esta figura de maniquí, que apenas se parece a la Sharon Stone que volvió locos a los espectadores en *Instinto Básico*. En la entrevista de la revista, Stone habla sobre su infancia en Pensilvania y los desafíos de ser una niña pequeña bajo la aplastante presión de los adultos.

Ha compartido anteriormente detalles impactantes de su vida en su libro *La Belleza de Vivir dos Veces*, revelando que sufrió abuso físico por parte de su padre y acoso sexual por parte de su abuelo. Pero no importa lo que sucediera, siempre se esperaba que “fuera una buena niña” y mantuviera el silencio.

“Ser la persona que se espera que siempre sea perfecta, que nunca se queje, que siempre haga todo bien, y hacerlo sin ningún reconocimiento es realmente aburrido. Ser la niña silenciosa y codependiente es un rol poco saludable,” confió Sharon a sus lectores.

En su libro, reflexiona sobre su vida profesional y personal, ofreciendo destellos entre bastidores de su trabajo con algunas de las estrellas más reconocidas del cine.

Contrario a lo que a menudo se ve en la pantalla, una asociación convincente en pantalla no siempre provenía de relaciones cálidas fuera de ella. Paul Verhoeven una vez dijo que si Sharon respeta a su coprotagonista, incluso las escenas más desafiantes se ejecutarán a la perfección.

En cuanto al 30º aniversario de *Instinto Básico*, Sharon mira hacia atrás en la película a través del prisma de sus experiencias de vida. Ha mencionado que no fue hasta esa película que se dio cuenta de que realmente tenía una apariencia impactante. Sin embargo, ahora reconoce la pesada carga de las expectativas ajenas que ese papel impuso sobre ella. La intensa atención mediática y el constante escrutinio público no fueron nada fáciles.

Por otro lado, algunos fans especulan que la revista misma es responsable del excesivo retoque. En cualquier caso, Sharon luce fantástica a los 63 años, a pesar de haber sufrido una grave hemorragia cerebral en 2001 que descarriló su carrera y su estabilidad financiera.