Paris Brosnan, el hijo de 23 años del legendario actor de James Bond, Pierce Brosnan, ha despertado recientemente la emoción de los fans con una sesión de fotos cargada de nostalgia. El joven modelo compartió imágenes con autos clásicos, y entre ellas destacó una toma especial que recreaba una pose icónica de Bond junto a su padre. Ambos posaron apoyados en el mismo BMW Z8 de la película de 1999 El mundo nunca es suficiente, dejando en evidencia su increíble parecido y desatando comentarios que sugieren que Paris podría seguir los pasos de su padre como el próximo 007.

Aunque la especulación de los admiradores no cesa, Paris mantiene el foco en su carrera como modelo y en su labor de activismo. Ha colaborado con su padre en campañas medioambientales, incluido un mensaje público que advertía sobre los peligros del plástico. Además, aprovechó su talento como cineasta para realizar un corto documental sobre el hambre infantil en Sri Lanka para el Programa Mundial de Alimentos de la ONU, y anteriormente había producido un video motivando a los jóvenes a ejercer su derecho al voto, reafirmando así su compromiso con causas sociales.

El joven también ha comenzado a incursionar en la actuación, muchas veces en proyectos junto a su familia. Compartió pantalla con su hermano Dylan y su padre Pierce en el western The Unholy Trinity. Al recordar la experiencia, Paris confesó que al principio actuar le resultaba “intimidante”, pero trabajar al lado de su padre le dio confianza y un ambiente relajado, permitiéndole dar sus primeros pasos en la interpretación mientras fortalecía aún más el lazo familiar.

La conexión entre padre e hijo va más allá del trabajo. Paris suele inspirarse en el estilo de Pierce, incluso recurriendo a su armario para recrear looks memorables. Esa cercanía también se refleja en momentos personales, como cuando Pierce celebró públicamente la graduación de Paris en la Escuela de Cine y Televisión de la Universidad Loyola Marymount, mostrando una combinación de mentoría profesional y apoyo paternal.

Aunque Paris apenas está comenzando a construir su camino, su faceta como modelo, cineasta y activista, sumada a su parecido natural con su célebre padre, ya ha captado la atención del público. Y aunque la idea de verlo convertirse en el próximo James Bond, por ahora, siga siendo solo una fantasía de los fans, sus múltiples talentos y su empeño en generar un impacto positivo demuestran que está labrando una trayectoria propia y con propósito dentro de la industria del entretenimiento.