En la fiesta del 40º aniversario de Dolce & Gabbana, Demi Moore, de 61 años, llamó la atención con un deslumbrante vestido cubierto de lentejuelas combinado con ropa interior negra y un maquillaje sutil. Su elección para la velada fue un largo vestido negro transparente adornado con decoraciones brillantes de arriba a abajo, con mangas largas y un escote modesto.

Moore irradiaba resplandor mientras las lentejuelas brillaban con la luz, complementadas por simples tacones negros con tiras. Optando por dejar que el vestido fuera el protagonista, no usó joyería, realzando su belleza natural con un maquillaje ligero y natural que destacaba sus rasgos con un labial rosa suave y una máscara de pestañas audaz.

Su cabello oscuro, lacio y partido en el medio, caía elegantemente hasta su cintura, complementando perfectamente su conjunto. Los fans elogiaron a Demi por su apariencia juvenil, con comentarios como, “Te ves increíble, y admiro cómo has permanecido fiel a ti misma,” y “Se ve increíble para su edad. ¡Bravo!”

Abordando las especulaciones en curso sobre procedimientos cosméticos, Demi Moore aclaró en una entrevista pasada, “He pasado por procedimientos, pero no en mi cara.” Aunque dejó abierta la posibilidad de futuras cirugías, expresó frustración con los persistentes rumores sobre sus gastos en cirugía plástica, diciendo, “Es frustrante cómo la gente sigue especulando sobre mis elecciones cosméticas.”