Ícono del pop, poco vista en público, deslumbra a los 71 con una belleza atemporal: ¿Adivinas quién es?

La icónica estrella del pop Cyndi Lauper, conocida mundialmente por su himno “Girls Just Wanna Have Fun”, fue vista recientemente manteniendo un perfil bajo mientras paseaba por la ciudad. Aunque intentó pasar desapercibida con unas gafas de sol extragrandes, un gorro negro con temática de “Los Goonies” y un atuendo oscuro, su carisma inconfundible no pasó desapercibido. Vestida con una chaqueta de mezclilla clásica sobre una camiseta negra sencilla y pantalones a juego, Cyndi añadió su toque característico con un labial rojo vibrante y un rostro luminoso que sigue robando miradas, incluso lejos de los escenarios.
Esta aparición pública coincide con el cierre de su exitosa gira por Australia, donde la legendaria cantante ha ofrecido conciertos con entradas agotadas en ciudades como Brisbane, Newcastle y Sídney. Con un show programado hoy en Adelaida y una última presentación en Perth este sábado, Lauper demuestra que su música sigue siendo tan relevante y apreciada como hace 40 años, cuando inició su carrera con un sonido fresco y una actitud irreverente.
El secreto de su permanencia en el mundo del espectáculo va más allá de su talento vocal: Cyndi siempre ha sido una fuerza creativa que rompe moldes. Desde que irrumpió en la escena musical a los 30 años, se negó a seguir los caminos tradicionales y apostó por su estilo punk, colorido y provocador. En lugar de repetir la fórmula del éxito, creó himnos inolvidables como “Time After Time”, “She Bop” y “True Colors”, canciones que todavía resuenan por su autenticidad y mensaje.
Pero su arte no se limita al escenario musical. Lauper también hizo historia en Broadway al componer la música del musical Kinky Boots, por el que ganó un premio Tony en 2013 como Mejor Partitura Original—convirtiéndose en la primera mujer en lograrlo en solitario. Esta victoria fue especialmente significativa, ya que muchos en la industria dudaban de su capacidad como compositora. Sin embargo, Cyndi demostró que su talento no tiene límites. En su vida personal, también ha encontrado estabilidad y felicidad. Está casada con el actor David Thornton desde 1991, y juntos tienen un hijo de 26 años, Dex Lauper, quien ha heredado el amor por la música. Su duradera relación familiar es una rara joya en el volátil mundo del espectáculo, y refleja el equilibrio que Cyndi ha logrado entre su vida artística y personal.
Hoy, a sus 71 años, Lauper continúa brillando con una energía inagotable, combinando libertad creativa, una carrera sólida y una vida familiar enriquecedora—un verdadero ejemplo de cómo envejecer con gracia sin dejar de ser un ícono cultural.