¡Increíble transformación de la silla vieja y desgastada: resultado súper elegante y económico!
Cuando miré esta silla, me di cuenta de que, aunque todavía estaba en buen estado, la tapicería definitivamente había tenido días mejores, probablemente gracias a algunos gatos curiosos en casa. Decidimos darle a esta silla un nuevo comienzo.
Primero, la desmontamos cuidadosamente y retiramos la tela vieja, usándola como referencia. Luego, despojamos la espuma y la red desgastadas, tomando fotos de cada paso para recordar cómo volver a ensamblarla.
Para mi sorpresa, el marco de la silla estaba hecho de haya maciza en lugar del pino habitual. Todas las partes de madera estaban en buenas condiciones, excepto por una pata que tenía una grieta. La pegamos y dejamos secar durante un día completo.
Usando espuma y guata nuevas, reconstruimos la base del asiento. La tela antigua sirvió de plantilla para la nueva tapicería, a la que añadí algunos centímetros extra debido al aumento del grosor de la espuma.
Una vez que el acolchado estuvo completo, pasamos a la madera. Tratamos y lijamos las superficies para resaltar su belleza natural.
Con todas las partes de nuevo en su lugar, la silla finalmente estaba lista para su nuevo lugar en el hogar.