La estrella infantil de los 80s dejó la fama en su apogeo: ¿qué ocurrió después? – ¡Sus fotos a los 54 años!
En la década de 1980, Ricky Schroder fue una de las estrellas infantiles más famosas, conquistando corazones con su inolvidable actuación en The Champ a tan solo nueve años. Nacido el 13 de abril de 1970 en Staten Island, Nueva York, el camino de Ricky hacia el estrellato comenzó cuando su madre notó su atractivo y lo llevó a sesiones fotográficas desde los tres meses. A los siete años, ya había conseguido un papel clave, ganando un Globo de Oro por su emotiva interpretación de T.J. Flynn en The Champ. Su éxito temprano lo marcó como una de las estrellas jóvenes más brillantes de Hollywood, y el mundo estaba ansioso por ver qué vendría para el joven actor.
A pesar de su ascenso rápido a la fama, la conexión de Ricky con Hollywood siempre fue tensa. Admitió que nunca sintió que perteneciera al mundo brillante y de alta presión del entretenimiento. Para cuando tenía apenas unos años de adolescencia, comenzó a cuestionar el camino que otros habían trazado para él, lo que llevó a un giro en su vida personal y decisiones profesionales. Mientras Hollywood le ofrecía fama y fortuna, Ricky cada vez se sentía más como un extraño. En la cima de su carrera, decidió apartarse, buscando una vida fuera del foco, una vida que le permitiera tomar sus propias decisiones y enfocarse en lo que realmente le importaba: fe, familia y contar historias.
En los años posteriores a su salida de Hollywood, Ricky adoptó una vida más privada, estableciéndose en Colorado y distanciándose de las presiones de la fama. Aceptó su camino espiritual y comenzó a enfocarse en nuevas formas de expresar su pasión por contar historias. Ricky fundó la Reel American Heroes Foundation, una organización sin fines de lucro dedicada a crear películas y documentales que celebren los valores patrióticos y honren a los veteranos, primeros respondedores y sus familias. Este cambio de la pantalla plateada al heroísmo en el mundo real marcó un cambio significativo en su vida, pero uno que se alineaba con sus prioridades en evolución.
La vida personal de Ricky también evolucionó durante este tiempo. En 1992, se casó con Andrea Bernard, productora y escritora, y juntos tuvieron cuatro hijos. Sin embargo, su matrimonio terminó en 2016, y los años posteriores a su divorcio estuvieron llenos de dificultades. Surgieron informes sobre sus luchas con las fiestas y su bienestar después de la separación, lo que llevó a su familia a intervenir. A pesar de los desafíos, sus seres queridos, especialmente sus hijos, siguieron siendo un apoyo, empujándolo a priorizar su salud y felicidad.
Hoy, a los 54 años, Ricky ha encontrado paz lejos de la cámara. Ha adoptado una vida más tranquila con su nueva pareja, Julie Trammel, y sigue valorando a su familia. Aunque ya no busca el centro de atención, Ricky sigue profundamente involucrado en la fe y en contar historias. A través de su trabajo con su fundación y su dedicación a su vida personal, ha forjado un camino significativo, demostrando que incluso después de alejarse de la fama, aún se puede encontrar propósito y satisfacción.