Lynn Yaeger es una periodista de renombre cuya aguda ironía y sentido del humor han sido un sello distintivo de las páginas de moda de The Village Voice durante tres décadas, y ahora aparecen regularmente en Vogue, WSJ y New York Magazine. Sin miedo al pronunciarse, al igual que en su estilo, Yaeger es conocida por su franqueza sin disculpas en el papel y su estilo profundamente individualista.

Es inmediatamente reconocible por su cabello corto teñido con henna, su maquillaje de muñeca y sus faldas voluminosas y en capas, que ha creado junto a otras figuras excéntricas de la moda como Isabella Blow y Anna Piaggi. Es una amante de Japón y una ávida coleccionista de antigüedades y objetos raros, como las muñecas originales de Raggedy Ann. En una entrevista, el diseñador Marc Jacobs dijo que Yaeger era una de sus musas, y su estilo ha influido en otros diseñadores, incluidos Undercover, Alexander Wang y Chloé.

“Saqué un préstamo estudiantil”, recuerda, “y pensé que si gastaba todo el dinero del préstamo en vestidos, me sentiría más segura y estudiaría más. Compré seis vestidos franceses—todavía los recuerdo, eran hermosos—y me quedé sin dinero.” Para remediar su situación financiera, Yaeger tomó un trabajo a medio tiempo en el departamento de publicidad de The Village Voice, lo que llevó a una oportunidad para escribir para el periódico.

“El segundo artículo que escribí fue una pieza humorística sobre hacer las maletas para Europa. Helen Gurley Brown, que era la directora de Cosmopolitan, lo leyó, llamó al editor de The Voice y dijo, ‘Me encanta este artículo, lo compraré para Cosmo. ¿Quién es esta Lynn Yaeger? Escribe tan bien.’”

Yaeger trabajó en The Voice durante unos 30 años—“toda mi vida adulta”—hasta que fue despedida inesperadamente el 30 de diciembre de 2008. “Pensé, ‘Dios mío, no voy a ir a los desfiles.’ Estaba devastada. Luego recibí una llamada de New York Magazine, y me dijeron, ‘¿Nos cubrirías los desfiles de moda?’ Fue un regalo tan inesperado.”