Sarah Sinclair, de 28 años y originaria del Reino Unido, ha cubierto la mayor parte de su cuerpo con tatuajes. Recientemente, esta joven madre, que está criando a una hija, decidió extender su lienzo a su rostro.

Entusiasta del tatuaje desde los 18 años, Sarah ha ido ampliando los límites del arte corporal cada año. Incluso ha llegado a tatuarse permanentemente la cara, incluyendo las frases “destacar” y “ser original”.

Su rostro también presenta el nombre y la fecha de nacimiento de su hija, la frase “el amor es dolor” y algunos corazones. Una mariposa en su mejilla cubre un viejo tatuaje de un ángel llorando.

Según Sarah, al principio estaba preocupada por cómo reaccionaría su hija a los nuevos tatuajes, hasta que le mostró que ahora su cara lleva el nombre y la fecha de nacimiento de su hija.

Algunos usuarios creen que Sarah ha ido demasiado lejos y que ahora parece “un demonio”, con muchos comentarios señalando que su apariencia, después de todas las transformaciones, se asemeja a la de un típico villano de dibujos animados infantiles.

Algunos seguidores han acusado a la británica de engaño. Después de que las fotos recientes se publicaron en las redes sociales, comenzaron a aparecer comentarios como: “¡Ella no se ve así, chicos! ¡Es un filtro! ¡Ninguna persona en su sano juicio haría esto! ¡Es un filtro!” En respuesta a estos comentarios, Sarah grabó un video en el que primero aplaudió y luego dijo: “Para aquellos que dicen que mi cara es un filtro y que estoy inventando esto—no hay filtros, lo juro.”

Las opiniones en las redes sociales están divididas: mientras algunos creen que Sarah se ha excedido con los rellenos y tatuajes, otros están ansiosos por elogiarla.

En una entrevista con una publicación local, Sarah explicó que no tiene miedo de verse diferente.