Los planes de Sylvester Stallone para mejorar su lujosa finca en Palm Beach se han visto obstaculizados. La estrella de acción de Hollywood, conocida por sus papeles icónicos, ha enfrentado la oposición de sus vecinos respecto a su propuesta de instalar una barrera flotante cerca de su propiedad frente al mar.

Stallone y su esposa, Jennifer Flavin, se mudaron a Florida en busca de un estilo de vida más tranquilo, comprando una mansión de 35 millones de dólares en el exclusivo North End. Sin embargo, su deseo de privacidad ha chocado con las preocupaciones de los residentes locales.

Aunque Stallone afirma que la barrera tiene como fin evitar que los escombros se acumulen en su orilla, los documentos revelan un propósito secundario: restringir el tráfico de barcos cerca de su propiedad. Esto ha generado preocupación entre los vecinos, quienes creen que la barrera limitaría de manera injusta el acceso público a la vía fluvial.

La controversia ha desatado un debate acalorado y ha atraído la atención de agencias regulatorias. El período de comentarios públicos sobre la propuesta de Stallone ha concluido, pero el resultado sigue siendo incierto. La oposición de los residentes podría obligar a Stallone a revisar sus planes o enfrentar nuevos desafíos en su intento por crear un oasis privado en su nuevo hogar.