Sally Field, de 78 años, enfrenta duras críticas por envejecer de manera natural: ¡pero su verdadera belleza brilla con fuerza!

Sally Field, una verdadera icono de Hollywood con una carrera que abarca casi seis décadas, ha cautivado al público con sus inolvidables actuaciones tanto en la pantalla grande como en la pequeña. Además de su éxito como actriz, que incluye incursiones en la dirección, Field es ampliamente respetada por su espíritu compasivo y su dedicación al activismo. Nacida en Pasadena, California, en 1946, en una familia vinculada al mundo del entretenimiento, los primeros papeles de Field en series de televisión como Gidget y La monja voladora marcaron el inicio de una carrera notable que parecía casi predestinada desde el principio.
A lo largo de su tiempo bajo los reflectores, Field ha enfrentado con gracia los desafíos de la industria del entretenimiento, particularmente el problema generalizado del ageísmo hacia las mujeres. Ha sido vocal sobre su decisión de evitar la cirugía estética, subrayando la importancia de abrazar el proceso natural del envejecimiento. A pesar de las presiones sociales y las críticas ocasionales en línea sobre su apariencia, Field se ha mantenido firme en sus creencias. En entrevistas sinceras, ha celebrado la sabiduría y la fortaleza que vienen con la edad, valorando las experiencias que cada año de vida representa.
Menos conocida es la lucha de Field contra la osteoporosis, una enfermedad que reveló públicamente en 2005. La osteoporosis, que reduce la densidad ósea y afecta a menudo a las mujeres después de la menopausia, ha impactado su salud, pero no ha debilitado su resistencia. Lamentablemente, su condición a veces la ha convertido en blanco de comentarios insensibles en línea sobre su apariencia. Sin embargo, la actriz ganadora del Oscar ha enfrentado estos desafíos con dignidad, extrayendo confianza y apoyo inquebrantable de su querida familia.
La vida personal de Field se ha enriquecido profundamente por sus tres hijos: Peter Craig y Eli Craig, de su primer matrimonio con Steven Craig, y Sam Greisman, de su matrimonio con Alan Greisman. Los tres han forjado carreras exitosas: Peter como guionista aclamado y Eli como actor y director. Field ha hablado en muchas ocasiones de su inmenso orgullo por sus hijos, describiéndolos como personas amables, cariñosas y logradas. Su rol como madre sigue siendo una de sus mayores fuentes de alegría y satisfacción.
En los últimos años, Field también ha asumido el rol de abuela de sus cinco nietos, sumando aún más felicidad a su vida fuera de Hollywood. Después de vender su casa de toda la vida en Malibu, se estableció en una encantadora residencia con vista al mar en Pacific Palisades, Los Ángeles. El legado duradero de Sally Field en la industria del entretenimiento, combinado con su fortaleza al enfrentar desafíos personales de salud y el amor constante de su familia, pinta el retrato de una mujer excepcional cuya gracia, talento y resiliencia siguen siendo una fuente de inspiración.