Hace diez años, Layla King consideró someterse a una cirugía de reducción de senos debido a los desafíos que enfrentaba al vivir con un busto grande. Sin embargo, tras consultar a un cirujano, decidió no hacerlo y, con el tiempo, aprendió a aceptar su cuerpo tal como es. Hoy, a sus 27 años, la madre de tres hijos de Toronto ha construido una gran audiencia en redes sociales: casi 747,000 seguidores en Instagram y alrededor de 100,000 en TikTok, donde comparte sus experiencias, promueve la positividad corporal y habla abiertamente sobre la vida con un busto talla 16.

En una de sus historias virales, Layla recordó un incidente en la escuela de sus hijos, donde una profesora la avergonzó sutilmente por no usar sostén. Vestida con una camiseta sencilla y leggings, Layla contó que la docente insinuó que su atuendo era “inapropiado”. Ella cree que la crítica no estaba en la ropa que llevaba, sino en su decisión de ir sin sostén. “Creo que el hecho de que no llevaba bra hizo que lo consideraran ‘inapropiado’”, compartió Layla, enfatizando que se niega a vestirse para cumplir con las expectativas ajenas.

Su figura curvilínea suele llamar la atención, algo que, según ella, a veces provoca juicios, especialmente de otras mujeres. Ha notado que algunas parecen evitarla, como si temieran que pudiera atraer a sus parejas. “Si les molesta tanto, deberían esconder a sus esposos”, dijo, dejando claro que no le interesa la pareja de nadie más. Para Layla, la incomodidad que otros expresan dice más sobre ellos que sobre ella misma.

Su lucha con su busto comenzó en la infancia, creciendo rápidamente de una talla A a una C en apenas un año. Para noveno grado, ya usaba una talla E, lo que complicaba comprar ropa y afectaba su autoestima. A menudo tenía que elegir tallas más grandes, a pesar de tener cintura delgada, y no podía usar la ropa de moda que disfrutaban sus compañeras. A los 18 años estuvo a punto de someterse a la cirugía de reducción de senos, pero finalmente decidió conservar su cuerpo tal como era.

Hoy, Layla ha encontrado confianza y éxito. Se gana la vida a través de OnlyFans y mantiene una relación amorosa con una pareja que acepta y celebra su apariencia. A través de sus redes sociales, sigue compartiendo mensajes empoderadores mientras muestra su cuerpo con seguridad. A pesar de las críticas de algunos seguidores que le sugieren usar sostén o someterse a cirugía, Layla responde con amabilidad, agradeciendo la atención, pero manteniéndose firme en sus decisiones.