Esta encantadora casita junto al río St. Croix, un afluente del Mississippi, llama la atención de los transeúntes. Imagina caminar por el bosque y, de repente, encontrarte con una pequeña cabaña de cuento de hadas: una casa de madera negra adornada con guirnaldas.

La dueña de este retiro en el bosque es Allison, de Minnesota, madre de dos hijos y agente inmobiliaria. La casa principal de Allison, también ubicada en el río St. Croix, fue construida en la década de 1890. Esta diminuta casa se utiliza como un refugio familiar para escapadas de fin de semana y también como una fuente adicional de ingresos. Estas pequeñas casas, conocidas como Tiny Houses, representan no solo un formato de vivienda, sino también un estilo de vida. Los propietarios de estas casas ahorran en impuestos y materiales de construcción.

El exterior de la casa se ve increíblemente acogedor. Su tamaño es de poco menos de 10 metros cuadrados, pero hay dos estructuras adicionales cerca, incluyendo una sauna y un baño.

El río está a 700 metros de la casa, y la casa principal de Allison se encuentra a medio kilómetro de distancia.

La casa tiene dos niveles, lo que crea una sensación de amplitud. El primer piso cuenta con un área de estar con una pequeña cocina, mientras que el altillo contiene una cama doble.

El área de comedor y la mini-cocina están equipadas con todo lo necesario para preparar comidas: puedes hacer café, preparar sándwiches o platos más sustanciosos, y lavar los platos.

La cocina tiene todo lo esencial para una estancia cómoda de unos días o semanas, incluyendo una cafetera.

En el segundo nivel, hay un área de descanso. A pesar de los techos bajos, es muy agradable dormir aquí.

Cerca se encuentra la primera estructura auxiliar: una sauna, donde puedes lavarte y calentarte en una noche de invierno. ¡Solo faltan las escobas de abedul!

Finalmente, aquí hay una foto inspiradora. A todos les encantaría pasar una tarde aquí con una taza de café en la mano.

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