Un hombre de 87 años ha salvado a más de 2 millones de bebés gracias a su tipo de sangre especial: ¡Más información y conmovedoras imágenes del hombre con bebés enfermos!
James Christopher Harrison, un australiano de 87 años, ha hecho un impacto extraordinario al ayudar a más de 2.4 millones de bebés a través de sus donaciones de sangre. Su viaje comenzó a los 14 años, cuando necesitó una transfusión de sangre que le salvó la vida. A los 18, en 1954, comenzó a donar sangre para retribuir por la ayuda que había recibido. No pasó mucho tiempo antes de que los médicos descubrieran que su sangre contenía un anticuerpo único.
El plasma de Harrison es rico en un poderoso anticuerpo conocido como Anti-D, que es crucial para crear un tratamiento especial para la enfermedad hemolítica del recién nacido por Rhesus D (EHRN). Esta condición puede causar abortos espontáneos, muertes fetales y complicaciones severas en recién nacidos. Antes de los avances de la década de 1960, la EHRN causaba la muerte de miles de bebés australianos cada año. El descubrimiento de que inyectar a las madres Rh-negativas con inmunoglobulina RhD podía prevenir la EHRN al neutralizar cualquier célula sanguínea Rh-positiva fue un cambio de juego.
A lo largo de su carrera de donaciones de 60 años, Harrison realizó 1,173 donaciones. Hizo su última donación a los 81 años, cerrando un capítulo extraordinario de su vida. Su combinación de tipo de sangre rara le ha valido el apodo de “el hombre con el brazo de oro,” ya que su plasma es una fuente vital de tratamiento que salva vidas. Cuando los científicos australianos buscaban una solución para la EHRN, la sangre de Harrison se convirtió en la piedra angular del programa Anti-D, con su plasma contribuyendo a cada tratamiento Anti-D realizado en Australia.
El compromiso de Harrison no disminuyó incluso cuando alcanzó la edad de jubilación para donantes. Continuó donando semanalmente, acumulando 1,162 donaciones de su brazo derecho y 10 de su brazo izquierdo, demostrando una dedicación inigualable.
Dado que más del 17% de las mujeres australianas enfrentan el riesgo de EHRN, las contribuciones de Harrison han sido esenciales. Tomemos el caso del bebé Samuel, que ahora tiene apenas cinco semanas. Su madre, Kristy Pastor, recibió la inyección de Anti-D durante su segundo embarazo, gracias a los anticuerpos de Harrison. Kristy aprecia profundamente el desinterés de Harrison, reconociendo cómo sus donaciones ayudan a garantizar que madres como ella puedan acceder a este tratamiento vital para proteger la salud de sus bebés.
